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El año de Dios Padre

1999

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Oración del Santo Padre Juan Pablo II
para el tercer año de preparación
del Gran Jubileo del año 2000

Bendito seas Señor,
Padre que estás en el cielo,
porque en tu infinita misericordia
te has inclinado sobre la miseria del hombre
y nos has dado a Jesús, tu Hijo,
nacido de mujer,
nuestro salvador y amigo,
hermano y redentor.
Gracias, Padre bueno,
por el don del Año Jubilar;
haz que sea un tiempo favorable,
el año del gran retorno a la casa paterna,
donde Tú, lleno de amor,
esperas a tus hijos descarriados
para darles el abrazo del perdón
y sentarlos a tu mesa,
vestidos con el traje de fiesta.
¡A ti, Padre, nuestra alabanza por siempre!

Padre clemente,
que en el Año Santo
se fortalezca nuestro amor a ti y al prójimo:
que los discípulos de Cristo
promuevan la justicia y la paz;
se anuncie a los pobres la Buena Nueva
y que la Madre Iglesia
haga sentir su amor de predilección
a los pequeños y los marginados.
¡A ti, Padre, nuestra alabanza por siempre!

Padre justo,
que el gran Jubileo sea
una ocasión propicia
para que todos los católicos
descubran el gozo
de vivir en la escucha de tu palabra,
abandonándose a tu voluntad;
que experimenten el valor
de la comunión fraterna
partiendo juntos el pan
y alabándote con himnos
y cánticos espirituales.
¡A ti, Padre, nuestra alabanza por siempre!


Padre, rico en misericordia,
que el santo Jubileo sea
un tiempo de apertura,
de diálogo y encuentro
con todos los que creen en Cristo
y con los miembros de otras religiones:
en tu inmenso amor,
muestra generosamente
tu misericordia con todos.
¡A ti, Padre, nuestra alabanza por siempre!

Padre omnipotente,
haz que todos tus hijos sientan
que en su caminar hacia ti,
meta última del hombre,
los acompaña bondadosa
la Virgen María,
icono del amor puro,
elegida pro ti para ser Madre de Cristo
y de la Iglesia.
¡A ti, Padre, nuestra alabanza por siempre!

A ti, Padre de la vida,
principio sin principio,
suma bondad y eterna luz,
con el Hijo y el Espíritu,
honor y gloria, alabanza y gratitud
por los siglos sin fin. Amén.

Juan Pablo II

 

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