Testimonios

Hemos seleccionado, en sintonía con nuestro tema principal, un testimonio muy especial de opción radical por la sencillez de vida mediante. También os incluimos una pequeña colaboración de una periodista jubilada.

La Comunidad ecuménica y no-violenta de Turballos Juan Yzuel  juanyzuel@ciberiglesia.net

En Turballos, un pueblo de la serranía de Alcoy, en la provincia de Alicante, vive desde hace casi treinta años una comunidad de cristianos que optaron por la sencillez y la no-violencia. Bebiendo de la tradición de las comunidades del Arca, de Lanza del Vasto, discípulo cristiano de Gandhi, han pasado por distintas fases y hoy se denominan "Comunidad Ecuménica y No-Violenta". Y, en esas breves palabras se descubre toda su esencia. La forman hoy algunos matrimonios, personas que desean hacer una experiencia de comunidad, y su fundador, Vicente Micó, sacerdote de la diócesis de Valencia. Cuando llegaron al pueblo era una aldea abandonada por causa de la emigración. Hoy es un centro espiritual que atrae a jóvenes en búsqueda y a quienes desean parar para vivir en silencio. Organizan talleres y retiros en los que se puede participar. Para dar algunas pinceladas a este testimonio os ofrecemos estas imágenes de la visita de algunos miembros de Ciberiglesia a Turballos. Intercalamos sus propios textos.

	La oración es el centro de la vida. Varias veces al día la comunidad se reúne en la iglesia del pueblo. "La comunidad acoge a toda persona independientemente de sus creencias religiosas, respetando su camino y su fidelidad a su tradición religiosa. Esta apertura no es solamente tolerancia, sino la convicción profunda de que el Espíritu sopla donde quiere y que toda persona tiene algo que enseñarnos del "Dios de verdad que los hombres distintos llamamos con distintos nombres" (Oración matinal)"
	El trabajo es fundamental para la autosuficiencia de la comunidad. Se vive del trabajo manual, de la artesanía y del trueque de productos del campo con otras comunidades similares. "El trabajo tiene una triple vertiente en la comunidad: - Trabajo manual sobre las cosas, para darnos al servicio de nuestros hermanos y evitar la explotación, el abuso y la dominación, origen de revoluciones, guerras y conflictos. - Trabajo sobre sí mismo, para el conocimiento, la posesión y el don de nosotros mismos, trípode de la vida interior. - Trabajo sobre los demás, por medio de la obediencia mutua, la llamada a la conciencia y la corresponsabilidad."
	La comida comunitaria es un momento importante para compartir. La comida es vegetariana, por la opción radical de no-violencia. "Nos esforzamos en limitar nuestras necesidades para no caer en el consumismo y no contribuir a la explotación del Tercer Mundo. Nuestra alimentación excluye las carnes y los pescados. Lo viernes habitualmente se propone una jornada de ayuno y silencio."
	Opción de vida sencilla. Se recicla todo lo que otros tiran, como puede verse en esta imagen de una cocina. Se intenta prescindir, en la medida de lo posible, de cuando exija dependencia económica externa: teléfono, electricidad,... "En nuestras huertas y campos cultivamos la mayor parte de nuestros alimentos. Los trabajos de construcción y algunas artesanías completan esta economía no-violenta que tiende a liberar a la persona de la dictadura de los sistemas económicos. Todos los recursos se ponen en común. Cada uno aporta lo que tiene y recibe según sus necesidades"

Comunidad No-violenta
03839 - Turballos-Muro
(Alicante)
Tel.   649 578 412

Vivir sencillamente, un testimonio de hoy María Azurza azaray@euskalnet.net

El castaño de la terraza acaba de renovar su migro de cada primavera. Es un arbolito que se alza dos palmos y medio de la tierra en una simple maceta. De pronto, el día menos pensado, abre su botón más pino y en cuestión de horas nos regala esos brotes de hojas como pequeñas manos, maravilla de perfección.  Ha supuesto una de las emociones más entrañables de los últimos días en esta casa.

Belleza de la vida sencilla.  Cuando mi marido y yo estrenábamos la jubilación, con plácidas perspectivas de frecuentes escapadas a, ni una tertulia. Ni una excursión. Sigo atenta a la vida social y política de mi entorno y del mundo gracias a los medios de comunicación . Todo de un modo muy sencillo, sin ruido, sin protagonismos.

La vida sencilla puede ser muy rica y yo intento captar esa riqueza capaz de hacer feliz a una persona y también a una pareja. Es cuestión de fe, y cuesta. Cuesta meterse entre los pucheros, procurar hacer la casa más habitable, dedicarse eso tan pequeño que nadie me lo va a hacer. Vivir sencillamente, aunque uno diste de ser sencillo en su interior. Afortunadamente, el Dios de Jesucristo es sencillo y está siempre cerca de los pequeños.

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